Seguimos con el tour vacacional virtual que, en esta ocasión, nos lleva hasta la bella Italia a degustar uno de sus postres más internacionalmente conocidos y que está absolutamente delicioso. Y no me refiero al Tiramisú, aunque también sea harto conocido fuera de sus fronteras, sino a la panna cotta.
La panna cotta, que traducido del italiano sería nata cocida, es un postre típico de la región del Piamonte. En su origen no se utilizaba gelatina para que cuajara sino huevos lo que hacía necesario aumentar la temperatura y un mayor tiempo de preparación. Lo más normal es servirla desmoldada, como si de un flan se tratara, pero yo he optado por presentarla en vasitos individuales que también quedan muy monos ¿no os parece?
Aunque puede hacerse de multitud de sabores pero yo me he decantado, en esta ocasión, por la más tradicional y sencilla de todas ellas, la de vainilla con un toque de frutos rojos. En mi caso con un sirope de frambuesa al que le he dado un toque distinto, y también muy italiano, añadiendo unas hojas de albahaca en su preparación.
Ingredientes :
Para la panna cotta
- 500 ml de nata de montar (35% de M.G.)
- 65 g de azúcar
- 4 hojas de gelatina (equivalentes a unos 6 g en polvo)
- 1 cucharadita de pasta de vainilla
- 250 g de frambuesas
- 30 g de azúcar
- 2 cucharadas de agua
- 1 cucharada de zumo de limón
- 3 ó 4 hojas de albahaca
Para preparar la panna cotta lo primero que tendremos que hacer es hidratar la gelatina, para ello sumergirla hoja a hoja en un platito con agua fría y dejar reposar unos 10 minutos.
Poner a calentar a fuego medio, en un cazo, la nata junto al azúcar y la vainilla y, cuando empiece a hervir retirar del del fuego. Estrujar la gelatina entre los dedos, para retirar todo el agua posible, añadirla al cazo y remover con una varilla hasta que esté totalmente disuelta.
Repartir la mezcla entre los vasitos y dejar templar antes de meter en la nevera. Necesitará por lo menos 6 horas para que cuaje por completo.
Para preparar el sirope poner todos los ingredientes en un cazo, reservando alguna frambuesa para decorar los vasitos, y dejarlo cocer a fuego bajo, removiendo de vez en cuando, durante unos 10 minutos. Pasado ese tiempo colar, para retirar las semillas de las frambuesas y las hojas de albahaca, y dejar enfriar.
Sólo quedará repartir el sirope en los vasitos sobre las panna cottas y volver a llevar a la nevera durante un rato para que éste último coja algo de cuerpo.
A la hora de servir decorar con las frambuesas reservadas y unas hojitas de albahaca fresca.
Con esta última foto no os digo nada y os lo digo todo... si me descuido no me dejan ni una, jejjeje.