Una propuesta super original y al mismo tiempo muy divertida. La receta que a mí me ha tocado se corresponde con el postre preferido de Elisabet del blog "Tots a la cuina". Espero que le agrade mi Sacher tanto como a mí me ha gustado prepararla.
La receta del bizcocho la hice con la thermomix y la saqué de uno de sus libros de repostería : "Simplemente espectacular", pero la rellené con mermelada de fresa y la cobertura tampoco es la misma que la que pone en el libro. Esta es mi receta.
Ingredientes:
- 3 huevos
- 120 g de azúcar
- 80 g de harina de repostería
- 40 g de chocolate en polvo
- 1 pellizco de sal
- 150 g de mermelada de fresa
- 150 g de pepitas de chocolate de fundir del Mercadona
- 1 cucharada de mantequilla
Forrar un molde desmontable con papel de horno. Engrasarlo si queréis, a mí se me olvidó y no lo hice pero se desmoldó de maravilla de todas maneras.
Poner la mariposa en las cuchillas. Poner en el vaso los huevos y el azúcar y programar 6 min., 37º, vel. 4.
Cuando pase el tiempo volver a programar otros 6 min., vel. 4 pero esta vez sin temperatura.
Mezclar el cacao, la harina y la sal hasta integrar bien.
Abrir la tapa y añadir la mezcla de chocolate alrededor de la mariposa.
Cerrar y poner 4 seg, vel. 3.
Retirar la mariposa y, con la espátula, terminar de envolver.
Verter la crema en el molde y hornear. En el libro pone que duante unos 8 minutos pero cada horno es un mundo. Yo lo tuve casi 20 minutos poniéndolo en un molde de 18 cm. de diámetro.
Sacar del horno y colocarlo sobre una rejilla dejandolo reposar unos 5 minutos, desmoldar y terminar de enfríar sobre la rejilla.
Cuando esté frío partirlo a la mitad.
Rellenar con la mitad de la mermelada.
Volver a taparlo con la otra capa de bizcocho. Poner el resto de la mermelada por la parte superior del pastel cubriendolo bien.
Derretir las pepitas de chocolate junto con la mantequilla en el microondas con cuidado de que no se nos queme, Yo lo puse a 1/2 potencia durante 2 minutos, lo removí bien y lo metí otro minuto.
Bañar todo el pastel por encima y por los laterales. Dejar enfríar.
Alisar con un cuchillo caliente la superficie del pastel par dejarla lo más lisa posible.
Y cuando esté totalmente fría y la cobertura durita solo tenemos que proceder a decorarla. Yo primero la espolvoreé con virutas de chocolate blanco, después lavé una fresa y la corté en láminas formando un abanico y, por último, le eché granillo de colores por encima para darle un toquecito de color.
¿A qué queda monísima? Y aquí tenéis el corte... ummm ¡qué jugosa y rica estaba!