Spitzbuben. Suiza. Faltan 20 días

    La Navidad se acerca poco a poco, ya solo faltan 4 días, y en Suiza los niños esperan impacientes la llegada de Christkindli, el ángel vestido de blanco con la cabeza engalanada con una corona llena de joyas, mientras van descubriendo que se esconde detrás de cada ventana de sus calendarios de adviento. El sonido de una campana de plata anunciará la llegada de Christkindli y la de sus pequeños ayudantes.
    Las luces del árbol se encienden cuando entran, cargados de regalos.
    Mientras se espera el día es que resuene el tañido de la campanilla de plata los suizos preparan la llegada de la Navidad, se enciende cada domingo una de las velas de la corona y se hornean decenas de galletas. (Fuente : La Navidad en el Mundo)
    Fröhlichi Wiehnach!! Joyeux Nöel!!

     Ingredientes :

• 250 g de mantequilla a temperatura ambiente
• 125 g de azúcar glass
• 2 cucharaditas de azúcar glass avainillado
• 1 pizca de sal
• 1 clara de huevo
• 350 g de harina de repostería
• mermelada de albaricoque

    Batir la mantequilla hasta que esté cremosa. Añadir el azúcar, el azúcar avainillado y la sal y batir un poco más.

    Agregar la clara y seguir batiendo hasta que esté bien integrado.

    Incorporar la harina y amasar hasta que quede homogénea, lisa y que no se pegue a los dedos. Dividir en dos, envolver en film plástico y dejar enfriar en la nevera durante aproximadamente media hora.

    Estirar la masa con un rodillo hasta que tenga un grosor de unos 2mm. Recortar con un cortador redondo con el borde rizado y repartir sobre varias bandejas de horno cubiertas con papel.

    Cortar el centro de la mitad de las galletas con cortadores más pequeños. Dejar enfriar en la nevera durante 15 minutos, por lo menos, para que no pierdan la forma al hornear.

    Precalentar el horno a 200ºC.

    Hornear durante unos 6 minutos, hasta que empiecen a dorarse los bordes.

    Sacar y dejar reposar un poco en la bandeja para que pierdan un poco de calor y evitar así que se rompan al trasladarlas. Pasar a una rejilla para que se enfríen totalmente.

    Calentar la mermelada en un cazo, colocar una cucharadita en el centro de cada galleta de base y tapar con las del centro recortado.

    Las galletas originales van espolvoreadas con azúcar glass pero para mí estaban suficientemente dulces y no lo hice.

    Esta es una receta familiar de Liliana Fuchs que publicó en Directo al paladar y, en su entrada, nos contaba que es habitual en los hogares suizos, durante todo el tiempo navideño, encontrar estas y otras galletas dispuestas en bandejas siempre listas para agasajar a los invitados.

    Cuando vi la de galletas que salían con esa cantidad de masa pensé que iba a tener galletas para un montón de tiempo pero nada más lejos de la realidad, en solo un par de días habían volado como por ensalmo... señal de que estaban buenas ¿no?