En Navidad, a la que ellos llaman Nollaig, la tradición manda que, en la noche de Nochebuena, el más pequeño de la familia encienda una vela, que se colocará en la puerta o al lado de una ventana, para dar la bienvenida a José y María en su peregrinar buscando refugio e indicándoles que allí tendrán el cobijo y el calor de un sitio seguro. La vela se dejará encendida toda la noche y solo podrá apagarla una niña o mujer cuyo nombre sea María.
Acabada la cena se coloca en la mesa de nuevo, cercano a la vela encendida, un pan con semillas de alcaravea y pasas, uvas y un vaso de leche, el fuego no se apagará esa noche, dejándose la puerta trasera abierta para que los peregrinos puedan así reponer fuerzas. Este costumbre tiene origen en la creencia celta de que un extraño que pedía amparo podía bien ser una divinidad disfrazada.
El día 26, St Stephen, se festeja el Wren Boys donde los jóvenes salen a las calles, estrafalariamente vestidos y con sus caras tiznadas de hollín, desfilan cantando canciones tradicionales y pidiendo dinero. A todo aquel que les da un donativo le regalan una pluma que dicen va cargada de buena suerte.
En Nochevieja los irlandeses limpian a fondo sus casas como señal de buen augurio, llenan la despensa de provisiones y la bodega de leña con la esperanza de que el año nuevo sea igual de abundante.
El día 6 de Enero se celebra Oíche Nollaig na mBan donde, durante ese día, los hombres se encargan de la casa y de la comida para que las mujeres descansen... ese si que es un regalo de reyes, jejjeje, ¿a qué si? Porque los regalos los trae San Nicolás solo que, aquí en Irlanda, va vestido de verde. Los niños se encargan de dejarle un minced meat pie y un vaso pequeño de whiskey irlandés o un botellín de cerveza para él y una tiernas zanahorias para sus renos.
En cuanto a las comidas, en Nochebuena es costumbre tomar como postre Christmas pudding y en Navidad comer los típicos Minced meat pies.
Faltan 4 días. Nollaig Shona Dhuit!!
Estos pastelillos proceden de la edad media, ya eran consumidos por los cruzados a su regreso de Tierra Santa, por eso la tradición dice que no hay que cortarlos nunca sino comerlos a bocados y en silencio.
A Enrique V de Inglaterra se los sirvieron en el banquete que tuvo lugar con motivo de su coronación en 1413. Durante el mandato de Oliver Cromwell fueron prohibidos, así como todo lo que estuviese relacionado con cualquier tradición y/o ceremonia de la religión cristiana.
Ingredientes :
- 1 lámina de masa quebrada
- 200 g de carne picada
- 30 ml de agua
- 1 cucharadita de bovril (extracto de carne)
- 1/2 manzana (100 g)
- 25 ml de vinagre de manzana
- 50 g de azúcar moreno
- 50 g de ciruelas pasas
- 50 g de pasas sultanas
- 50 g de pasas golden
- 50 g de orejones de albaricoque
- 30 g de almendras peladas
- 1/2 naranja
- 1 limón
- 2 cucharadas de manteca de cerdo
- 1/4 de cucharadita de canela molida
- 1/4 de cucharadita de nuez moscada molida
- 1/2 cucharadita de mezcla de especias para Christmas pudding
- 100 ml de brandy para remojar las frutas + para el relleno
Poner a remojo en los 100 ml de brandy, durante media hora, las pasas, las ciruelas pasas y los orejones. Las ciruelas y los orejones cortados en cuadraditas de tamaño similar al de las pasas. Escurrir y reservar. Medir el brandy que queda y añadir más, si hiciera falta, hasta completar 50 ml.
Disolver, en un cazo, el azúcar en el vinagre y añadir la manzana pelada y cortada a daditos. Poner a fuego lento y dejar cocer hasta que la manzana cambie de color. Añadir la mezcla de frutas remojadas anteriormente, las especias, el zumo y la ralladura de la media naranja y del limón y las almendras groseramente picadas. Mezclar bien y dejar cocer hasta que tenga la textura de una mermelada espesa. Añadir el brandy y dejar cocer un par de minutos más. Reservar en caliente la mitad y la otra mitad guardarla en un bote esterilizado ya que solo necesitaremos una de las partes.
Poner la manteca en una sartén profunda y, cuando esté derretida, agregar la carne. Rehogar hasta que pierda el color a crudo. Verter el agua y el extracto de carne y dejar que reduzca un poco antes de añadir la mezcla de frutas reservadas. Remover hasta que la mezcla esté uniforme y dejar espesar ligeramente.
Precalentar el horno a 200º C.
Extender la lámina de masa quebrada y cortar círculos, del tamaño del molde que se vaya a utilizar, con ayuda de un cortador acanalado, y estrellas que servirán como tapas.
Engrasar ligeramente un molde de tartaletas, yo usé uno de magdalenas, y colocar un círculo dentro de cada cavidad. Apretar un poco el fondo para que no queden burbujas por bajo y rellenar con una cucharada de mezcla de carne y frutas. Cubrir con las estrellas y pincelar con un poco de leche.
Hornear durante unos 15 minutos hasta que estén dorados. Dejar enfriar sobre una rejilla.
Una vez fríos espolvorear con un poco de azúcar glass.
La verdad que estos pastelillos me han sorprendido muy gratamente. Alguna vez había comprado una caja de los comerciales y no es que me hubieran entusiasmado pero estos no tienen ni punto de comparación con los comprados. Están exquisitos... hasta a Sergio, que es un poco más "delicado" para las comidas, le han encantado.
2 comentarios:
Una locura de pastelitos de carne, vaya presentación tan maravillosa que tienen y que bonita la entrada con las costumbres de otros países tan distintas a las nuestras.
Un abrazo de las chicas de Cocinando con las chachas y Felices Fiestas!!
Que bocado más rico tiene este pastelito. Me lo llevo porque tengo que probarlo, es una exquisitez y te ha quedado de lujo.
Besos.
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