Tartiflette

    A mitad de Mayo del año pasado Trotamundos publicó una receta de tartiflette que me dejó enamorada. Me puse a buscar el reblochon de Savoia y, al final, lo encontré en Carrefour pero era demasiado grande, ya que la receta solamente iba a hacerla para dos, así que decidí dejarla en pendientes.
    Allí estaba hasta que de pronto, estas Navidades, encontré un "petite reblochon de Savoia" que era justo lo que necesitaba para la receta... ahora sí que no se me iba a escapar, jejjeje. El queso fue directo al carro de la compra y al día siguiente... ¿adivinar qué tenía para comer?

 
    Nada que ver mis fotos con las suyas, por supuesto, pero aunque el aspecto de mi tartiflette no es ni con mucho tan apetitoso como el de la suya la verdad es que la experiencia no me defraudó. Está rico, rico, riquísimo.

    Ingredientes :

• 100g de bacón ahumado
• 1 cebolla grande
• 1 diente de ajo
• 1 cucharada de vino blanco
• 350 g de patatas nuevas
• 150 g de queso reblochon de Savoia
• 85 ml de nata líquida
• Sal y pimienta negra recién molida
• Aceite de oliva virgen extra
• 1 cucharadita de romero seco

 
    Poner en una sartén sin grasa el bacon y freír hasta que se dore. De esta manera quitaremos gran parte de la grasa. Reservar.
    Cortar la cebolla en rodajas finas y dorar en la misma sartén con la grasa que ha soltado el bacon más una cucharada de aceite de oliva. Cuando empiece a estar dorada añadir el ajo cortado en láminas. Agregar el vino y dejar que se evapore por completo.
    Limpiar bien las patatas con un cepillo ya que las utilizaremos con piel. Cortarlas en rodajas de 1/2 cm de grosor. Poner en agua fría junto al romero y un poco de sal, llevar al fuego y cuando rompa a hervir dejar 5 minutos. Retirar y escurrir.
    Añadir el bacon a las cebollas y mezclar hasta integrar, retirar el exceso de grasa.
    Cortar el queso en lonchas finas y reservar. En una fuente de horno, en varias pequeñas cocottes de cristal en mi caso, repartir la mitad de las patatas. Cubrir con una capa de cebolla y bacon y moler un poco de pimienta por encima. Repetir ambas capas y verter la nata por encima. Terminar distribuyendo el queso por encima por toda la fuente.
    Hornear a 200º C, con el horno precalentado, durante 25 minutos o hasta que esté dorado.
    Una manera de saber si está hecho es pincharlo con una aguja y comprobar que la patata esté tierna.
 

    Como podéis ver Yo lo hice en cazuelitas de cristal individuales. Así si sobra alguna queda perfecta ya que no se toca, pero os aseguro que con lo rico que estaba no sobraron ni las migas. Aunque si que he de decir que es un plato contundente que llena un montón.
 
    Y casualmente hoy también publica una tartiflette uno de mis gurus bloggeriles : el gran ManuCatman, así que si queréis ver su visión y unas fantásticas fotos ya podéis ir corriendo a su blog y, os lo aseguro, ya os podéis preparar para gozar...