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martes, 16 de junio de 2020

Confitura de nísperos y hierbabuena con aroma de azahar

    En la entrada anterior, desde #elpanperfecto, nos invitaban a viajar hasta Marruecos para descubrir las harchas. Buscando información sobre ellas no sólo descubrí la receta de los panes, sino que también encontré esta pedazo de delicatessen que, por supuesto, también me traje en la mochila. Y claro, tenía prisa por hacerla porque la temporada de Mzah, que es como allí llaman a los nísperos, está a puntito de terminar. Así que, o me ponía ya ha prepararla o no me quedaba otra que tener que aplazarla hasta el año que viene y, como me moría de las ganas de probarla ya, pues aquí la tenéis... caprichosa que es una, jejjeje.


    Yo he hecho unos pequeños cambios a la receta que nos dan en Nueva Cocina Marroquí, aparte de hacer menos cantidad porque estos eran los únicos los nísperos que quedaban en la frutería, no añadiendo manzana y cambiando la menta por hierbabuena, que era lo que he podido encontrar en el barrio.
    Esta confitura es una de las grandes clásicas en ese país pero, sobre todo, destaca en la ciudad de Marrakech. Y puedo asegurar que ésta ha venido a casa para quedarse porque está impresionante.
    Pero vamos con la receta.


    Ingredientes :
  • 500 g de nísperos, pelados y sin huesos (aproximadamente 750 g enteros)
  • 60 ml de agua de azahar
  • 200 ml de agua
  • 50 g de azúcar
  • 5-6 hojas de hierbabuena

    Lo primero será retirar bien las telenas que recubren los huesos porque amarga, pasa igual que con la parte blanca de los cítricos, y cortarlos en trocitos.
    Poner en una cazuela, a fuego lento, el agua y el agua de azahar. Cuando esté caliente, pero sin que llegue a hervir, añadir los trocitos de níspero y remover sin parar hasta que empiece a deshacerse la fruta .
    Entonces agregar el azúcar y seguir removiendo hasta que coja la textura espesa de una compota. Retirar del fuego y echar las hojas de hierbabuena.
    Rellenar los botes esterilizados con la mermeada caliente, cerrar y dejar boca abajo, para que se haga el vacío, hasta que se enfríen por completo. Conservar en la nevera.


1 comentario:

Yolanda Iglesias dijo...

Qué aromática! Tiene que estar deliciosa... ya me la imagino con unas buenas tostadas y su mermelada :D