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miércoles, 5 de julio de 2017

Sandwich Bodega de Anthony Bourdain {Reto Cookink the Chef}

    Hay dos momentos a lo largo del año que son especialmente emotivos para mí, en ellos los recuerdos de tiempos pasados regresan dejando un sinfín de sentimientos a flor de piel. La Navidad es uno de esos momentos, aunque creo que ese es compartido por casi todos los que ya empezamos a pintar canas. El otro es este en el que estamos, aunque pueda resultar chocante. El inicio del verano hace que me transporte a esas calurosas jornadas que, en mi niñez, pasaba en el pueblo. No había nada que me gustara tanto como el ir a comprar pan, ese olor de masa madre y levadura que te acompañaba una parte del camino ya te anunciaba el exquisito manjar con el que te ibas a encontrar. y, luego, con el pan recién hecho aún caliente entre tus manos, era poco más que imposible dejar de pellizcar una punta y deleitarte con su sabor.
    Cuando leí que el último libro que ha publicado Anthony Bourdain contenía las recetas favoritas de su niñez, las que le preparaba su madre y le gustaba comer en los momentos más felices de su infancia, las que son el tipo de recuerdos de comida que quiere compartir y transmitir a su hija no dudé de que una de esas recetas iba a ser la elegida para participar en el reto de este mes de Cooking the Chef. Ojalá yo también consiga transmitir ese tipo de recuerdos culinarios a mis hijos... aunque no escriba ningún libro para ello, jejjeje.
    Y después del rollo que os he metido, valientes y pacientes si aún seguís leyendo la entrada, paso a contaros la receta elegida por mí, las del resto de los participantes podéis verlas pinchando aquí.


    Este bocadillo es uno de los iconos para el desayuno neoyorkino (bacon, huevos y queso en un bollo crujiente) que se puede tomar en cualquier corner store junto con un café, una receta muuuy sencilla pero no por ello menos deliciosa.


    Ingredientes (para 2 sandwiches) :
  • 6 rebanadas de bacon
  • 2 kaiser rolls o panecillos de viena
  • 4 huevos L
  • Sal
  • Pimienta negra de molinillo recién molida
  • 4 lonchas de queso cheddar
 
    Poner una plancha de hierro con fondo grueso a fuego fuerte y cocinar el bacon hasta que esté dorado y crujiente... ojo, sin llegar a quemarse. Retirar con unas pinzas y reservar.
    Abrir los panecillos por la mitad y colocarlos, boca abajo, sobre la plancha durante un par de minutos para que se calienten y absorban parte de la grasa del bacon.
    Retirar los panecillos y poner sobre papel de estraza o de horno. Repartir el bacon entre los panecillos, 3 lonchas en cada.
    Batir los huevos y salpimentarlos al gusto, verter sobre la plancha y dejar cuajar la tortilla. Cuando ya esté casi cocida del todo repartir el queso uniformemente y dejar hasta que se comience a derretir.
    Retirar y distribuir sobre el bacon de los panecillos. Cerrar los sándwiches y envolver en el papel de estraza para transportarlos con facilidad manteniéndolos además calientes.
    Servir con un café.


    Los neoyorkinos tomarán esta delicia como desayuno pero para mí es la merienda-cena ideal al llegar a casa después de una dura y calurosa jornada de trabajo.


    Fuente : "Appetites cookbook" de Anthony Bourdain

11 comentarios:

La Taza de Loza dijo...

Vivi, no hay mejor cosa que nuestra confort food la nuestra, la de nuestra niñez. Siempre se asocia cualquier plato a los momentos del verano, de las fiestas, de nuestros buenos momentos. No me extraña que este sandwich o (bocata o panini) para otra parte del mundo, sea una gozada y habrá que probarlo, yo creo que con un pan muy especial y bien hecho, una maravilla. Muchas gracias por la propiesta. Besos

Sweet Blessings dijo...

Hola Vivi, si que es bello recordar esos bellos momentos de nuestra infancia, lograr transmitirlos con la misma pasión que los percibimos todo un reto, aunque para personas con empatía mucho más sencillo sentir toda esa felicidad y amor puesta en las palabras y comida como este caso.
Este sándwich me ha encantado, la verdad es un desayuno que nos gusta mucho en casa, o quizás a mi me gusta mucho y los demás solamente lo tienen que comer jajaja
Te ha quedado perfecto, totalmente delicioso! Me encanta!
Besitos!!

Mar dijo...

De verdad que me encantan estos sandwiches que estáis mostrando. Preparaciones de las de hacer a menudo para una cenita...qué ricooo.
Feliz verano
bss

Tartisymás dijo...

Menuda pinta tiene ese sandwich, con uno vas biin "espachao"!! Jajaja, se ve genial y muy rico. Besos!!

sopaypilla dijo...

lo que daría por pegarle un muerdo....que piiinnntaaaaaa
riquísimo! un beso y feliz verano!!

Marga dijo...

Soy fan de los sandwich, qué bárbaro qué pintaza tiene el tuyo Vero, me apunto al tuyo, bsssss

Cooking the Chef dijo...

Qué bonitos recuerdos! y la verdad es que coincido contigo... Navidad e inicio del verano...llegar al pueblo, oler a playa...enfin....(aunque a mi se me hacían demasiado largas las vacaciones) como le he dicho a todo el mundo que ha preparado sándwiches esoty encantada ... ahora vienen muy de gusto y la verdad es que norteamerica nos da diez vueltas con este tema. Me encantan y este tuyo, es pura lujuria, estuve a punto de considerarlo como mi receta. Ese punto caliente del pan y del queso, me vuelve loca.
Gracias una vez más Vivi, por venirte al reto. Besos y feliz verano!

Concha Martínez - Jugando con la cocina dijo...

Otro sandwich para la colección, me encanta, ahora mismo le daba un mordisco y no tardaré en imitarlo ;-)Acierto total.
Besos

Dekooking dijo...

Hola Vivi!! Grandes recuerdos. Con respecto a sandwich, estoy dispuesta a probarlo, aunque tendría que ir a correr unos kilómetros después, jajaja. Me lo apunto.
Bss

La cajita de Nieves y Elena dijo...

Tiene una pinta bárbara pero si aquí en España desayunáramos eso todos los días no cabríamos por la puerta y el colesterol por las nubes, estos newyorkinos están locos jejeje...
Besos
Nieves

Aquí se cuece jugando dijo...

¿Ves, tú? Este chef tan mediático y con tantos comentarios ácidos y tiene ese toque tierno de dejar un libro con recetas especiales para su hija. Qué bien. Me ha gustado este toque porque no he llegado a enamorarme de este chef para nada. Tu receta es contundente, fácil y riquísima. Para chuparse hasta los codos.